Hoy he ido a hacer la compra al Alcampo. Aparte de las perennes viejas que te empujan, te estrujan y te hacen unas prgaciones que te hacen desear ser mujer, y de las no merece la pena hablar, me he topado con una caja que decía: "caja para el medio ambiente". Se trata de una caja en la que no te dan bolsas sino que pagas unas bolsas hechas con papel reciclado y mierda de caballo que se supone, contaminan menos. Muy bien. Dejando a un lado el hecho de que me toca los cojones que para respetar el medio ambiente tenga que comprar putas bolsas marrones, me pregunto: ¿qué pasa con la gente que queremos contaminar más?, es decir. La gente que quiere contaminar menos puede ir a pagar a esa caja pero, ¿dónde está la caja en la que te dan bolsas hechas con crías de foca? ¿dónde están las cajas en las que la cinta transportadora está hecha con piel de aguilucho? ¿y la caja en la que me aseguran que la cajera desayuna tortillas hechas con huevos de dodo y grasa de ballena azul? Yo me cago en el medio ambiente. Quiero una caja que funcione con energía que salga de un horno que queme una tonelada de perros a la hora. Y la quiero ya. cojones.

La ira mueve el mundo. Sirve para todo. Desde abrir latas hasta para hacer llamadas telefónicas con contenido grotescamente sexual. Creo este blog para no terminar lanzando heces a mis vecinos por la ventana ya que odio a la gente. Bueno, a todos menos a ti. La gente es basura.

En este blog van a estar las cosas que me llenan de IRA homicida (la ira de mayor calidad). Usando esa ira para las letras calculo que llegaré al millón de lectores en los primeros 20 minutos de vida de este blog.